El mes de diciembre es considerado como el más emocional del año, donde empiezan los preparativos para pasar las fiestas en familia o con amigos y las ofertas están a la orden del día. Para cerrar el año de manera ordenada y planificar eficientemente el siguiente año, especialistas en finanzas personales brindan consejos para iniciar un año sin estrés financiero.
Al estar más expuestos emocionalmente por las fiestas de fin de año, es común dejarse llevar por los impulsos de las ofertas sin analizar previamente la capacidad de pago, dando como resultado una vorágine de cuentas que la persona no puede asumir, generando estrés financiero.
La Lic. Daisy Abente, directora de Superarte, explica que con la variedad de ofertas para estas fiestas, es oportuno promover el uso consciente y responsable del dinero, mediante el hábito de presupuestar y controlar los gastos. “No se trata de no comprar durante las fiestas, sino que antes de hacerlo se planifique los gastos a realizar. Sugerimos, en primer lugar, que la persona antes de decidir qué hacer con su aguinaldo, realice un análisis previo de su presupuesto, incluyendo sus obligaciones, luego sus deseos, y así decidir cómo quiere gastar ese dinero”, mencionó.
En ese sentido, la profesional añadió que realizar compras o transacciones bajo la influencia de las emociones probablemente no sean las decisiones más beneficiosas para la persona, por lo que es muy importante practicar el autocontrol y ordenar las ideas.
Por su parte, la economista Adriana Bock sugiere que para que el aguinaldo rinda mejor y sea presupuestado eficientemente, hay que distribuirlo en cuatro partes:
-La primera parte puede ser pensada para las fiestas de fin de año, para el “disfrute”.
-Un segundo 25 por ciento se puede guardar para imprevistos, ya que enero “es un mes largo” y también se puede destinar en los gastos de inicio de clases.
-Otra parte puede ser destinada al pago de deudas, sobre todo las atrasadas y en el caso de que surja alguna ventaja, como descuentos de intereses, incluso cancelar el pasivo.
-Por último, el mantenimiento de los “activos” es importante. Mejorar algunas cuestiones de la casa y la reparación del vehículo, son inversiones indicadas con el último 25 por ciento.
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