La Federación de Educadores del Paraguay (FEP) espera una convocatoria de los ministerios de Educación o de Hacienda, para resolver el conflicto sobre el aumento salarial al sector. De no llegar a un acuerdo, el gremio ratifica que irá a huelga y no se podrán iniciar las clases el 23 de febrero.
Ratificó que, de no llegar a un acuerdo con el Gobierno, no se podrán iniciar las clases en las instituciones públicas del país, porque los docentes irán a una huelga.
«No vamos a estar especulando. Acá, si no hay un acuerdo, no se van a iniciar las clases, por más que el ellos (el Gobierno) digan que se va a garantizar. No tiene la mínima posibilidad de cubrir entre 50.000 y 60.000 vacancias», expresó.
Los sindicatos del sector ya habían protestado porque el presupuesto aprobado por los legisladores era menor al que pretendían. De un aumento de al menos el 20% lograron incrementos diferenciados para cada nivel o cargo que como máximo, llegaban al 15%.
Pero con el veto del Poder Ejecutivo al Presupuesto 2017 sancionado por el Congreso, el salario de los maestros permanecerá igual, sin ningún porcentaje de incremento.
Los maestros exigen que los ministros de Hacienda y del MEC envíen un pedido para que se aprueben los aumentos en el Parlamento. Esa es la moneda de cambio para que las clases no se vean afectadas.