Ñeembucú quedó bajo agua

586

Tras nuevas precipitaciones se generalizan las quejas de los pobladores por la falta de acción para mejorar el buen drenaje de las aguas en la zona urbana y rural del departamento.

 


Las quejas apuntan a la improvisación de las obras, fundamentalmente los caminos, cuyos terraplenes embalsan las aguas, impidiendo el escurrimiento de la inmensa masa líquida que inunda el territorio de Ñeembucú.

En el departamento se registraron lluvias acompañadas de ráfagas de viento que superaron los 70 kilómetros por hora. Este fenómeno provocó la caída de árboles y el corte en el suministro de energía eléctrica en varios distritos del departamento.

Las cuadrillas de la ANDE realizan un gran esfuerzo para ir reponiendo paulatinamente el servicio con el correr de las horas. En Pilar, la combinación de viento y lluvia derribó numerosos árboles y produjo daños en el techo de varias viviendas.

Las ráfagas de viento también afectaron el Centro de operaciones de Emergencia, que la Secretaría de Emergencia Nacional (SEN) instaló en el aeropuerto Carlos Miguel Jiménez de esta ciudad. Las carpas ubicadas en el lugar fueron arrasadas por el viento, dejando sin techo al Centro de Operaciones de Emergencia.

Asimismo, varias calles de Pilar sufrieron las consecuencias de las precipitaciones, que igualmente inundaron una veintena de viviendas en la ciudad.

COMENTARIOS