Los candidatos cara a cara

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Los precandidatos a la presidencia por la ANR se vieron las caras durante un debate televisivo. Fue el disidente Marito Abdo Benítez quien arremetió con mayor virulencia cuestionando los indicadores de pobreza y seguridad de Santiago Peña.

El programa conducido por la periodista Mina Feliciángeli fue escogido como escenario del primer debate entre quienes aspiran a llevar la bandera colorada en las elecciones generales de 2018.

Tras las presentaciones de rigor se dio inicio al debate en aspectos tales como pobreza y seguridad, en los cuales el candidato oficialista sostuvo que bajo el gobierno de Cartes se logró una reducción de la pobreza en un 28%.

A criterio del exministro esto se produjo mediante un cambio en el manejo administrativo del Estado y los programas sociales del oficialismo. En ese sentido propuso que de ser electo continuará con tal modelo de gestión, especialmente hacia «las comunidades más vulnerables».

En respuesta, el candidato disidente desestimó los indicadores de su contrincante y culpó al gobierno de Cartes de aplicar un modelo excluyente, al tiempo de rechazar los porcentajes de reducción de pobreza mencionados anteriormente, basándose principalmente en datos de la Dirección de Estadísticas y Censos.

POLICÍA MANEJADA POR JOSÉ ORTIZ

Durante el debate, Marito Abdo elevó el tono de la crítica al momento de enfocarse lo referente a la seguridad, acusando directamente al empresario tabacalero José Ortiz cercano a Cartes, de manejar a la Policía Nacional, trayendo a colación lo ocurrido con el dirigente liberal Rodrigo Quintana.

Catalogó como una «bendición» la publicación del cruce de llamadas entre la noche del 31 de mayo y la madrugada del 1 de abril, entre Ortiz y varios referentes del gobierno.

«Este es el modelo a derrotar el que está al servicio de organizaciones delictivas, lo que salió en tapa demuestra lo que venimos diciendo, este gobierno se dedicó a destruir la institucionalidad», cuestionó el senador.

CULPÓ AL SENADO

En su descargo, Santiago Peña responsabilizó al Senado de no aprobar un proyecto de fortalecimiento en la seguridad ciudadana, que en su parecer hubiese contribuido para hacer frente al grave problema.

Este proyecto según Peña incluía la creación de un laboratorio forense para la Policía similar al existen en el Ministerio Público, como también un plan integral sobre violencia intrafamiliar.

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