Dos investigadores paraguayos hallaron la ecuación para obtener un combustible líquido, de características similares al gasoil, usando neumáticos en desuso. La investigación tuvo origen en una pregunta que, tal vez, muchos nos hemos hecho: ¿qué hacer con las cubiertas viejas?
Durante el año 2018, el Paraguay importó 96.232 toneladas de neumáticos, de las cuales, 5.695 corresponden a cubiertas usadas, según datos de la organización Trade Map. La vida útil promedio de estos cauchos es de 60.000 kilómetros, por lo que en poco tiempo se convierten en basura.
Estas cifras, sumadas al alto índice anual de infestación larvaria del Aedes aegypti (mosquito transmisor del dengue, zika y chikungunya), que se registra en el país cada año, dirigieron a los investigadores Shirley Duarte y Axel Dullak a buscar la forma de reciclar cubiertas en desuso, que suelen fungir de criaderos del insecto.
Shirley Duarte, magíster en Ciencias de la Computación e ingeniera química, de la Universidad Nacional de Asunción (UNA), se sumó al trabajo de grado del ingeniero químico Axel Dullak para la “Obtención de combustible líquido a partir de neumáticos en desecho”.
El principal resultado de esta investigación fue la obtención de una ecuación matemática para la producción de un combustible con características muy similares al diésel. El proyecto se encuentra actualmente en escala de laboratorio, es decir, aún se requieren varias pruebas.
¿Reemplazo del diésel?
Si bien los combustibles a base de caucho tienen menor emisión de dióxido de carbono que la materia prima fósil (petróleo), el combustible obtenido por los investigadores aún requiere de un proceso de refinamiento para que pueda funcionar en las mismas condiciones que el gasoil.
“Estamos desarrollando un proyecto nuevo para el refinamiento, que pueda reducir el contenido de azufre en nuestro combustible y así cumplir normas del fueloil. Además, buscamos un reactor automatizado y un condensador que nos ayude con la densidad del combustible, de modo a que pueda actuar como el diésel”, explicó Shirley Duarte a Última Hora.
¿Qué uso alternativo se le puede dar?
La investigadora explicó que el combustible que obtuvieron en el laboratorio, así como está, se puede emplear como un combustible en calderas, en reemplazo del gasoil.
“Aún no puede ser usado como diésel común, pero con estudios se puede determinar si sirve en otros motores” agregó.
Shirley Duarte agregó que, si bien esta es la primera investigación de este tipo en el Paraguay, hay muchas investigaciones con otros tipos de reactores. “Nosotros usamos uno de lecho fijo. El área de estudio es inmenso. También se puede hacer una mezcla con residuos agroindustriales y mezclarlo con combustibles de neumáticos”, detalló.
Relevancia
Los jóvenes investigadores señalan que lo relevante del descubrimiento reside en el diseño metodológico que se utilizó para obtener este combustible reciclado, ya que les permite tener una ecuación matemática con la tendencia de rendimiento del combustible en función a la temperatura, tasa de calentamiento y tamaño de la partícula.
Para la obtención de un litro de combustible de caucho se requieren de al menos dos kilos de neumáticos en desuso. Aún no hay cálculos sobre el costo de producción.
Esta investigación, que se inició en el 2013 y culminó en el 2018, fue financiada por el programa Prociencia de la Comisión Nacional de Ciencia y Tecnologías (Conacyt).
Para el refinamiento del combustible, se requiere de otro proceso. Los investigadores ya trabajan en un nuevo proyecto que podría permitir la fabricación de un combustible a base de neumáticos en desuso que pueda reemplazar el diésel.
La tendencia de reutilizar los neumáticos gana terreno a nivel mundial. Según la European Tyre Rubber Manufactures Association, entre 1999 y 2017, más de 24 millones de toneladas de neumáticos se reutilizaron en energía, y en 2010 solo el 4% de los productos fueron a parar e vertederos.
Más neumáticos en desuso que habitantes
Según datos del Servicio Nacional de Erradicación del Paludismo (Senepa), en el Paraguay habría 10 millones de cubiertas en desuso. Según el último censo, la población del país es de 7,1 millones.
Estos materiales son unos de los principales criaderos del Aedes aegypti, mosquito transmisor de enfermedades como del dengue, zika y chikungunya.
Actualmente, en Paraguay, existen firmas que se encargan de la destrucción de estos neumáticos y la Itaipú Binacional junto con empresas privadas, desarrollan un plan piloto para la conversión de los neumáticos en combustibles sintéticos.
Fuente: Ultima Hora
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