La dirigencia de Cerro Porteño se tomará su tiempo y por el momento no emitirá declaraciones oficiales tras el sumario impuesto de parte de la Asociación Paraguaya de Fútbol al club azulgrana.
Cerro Porteño no emitirá declaraciones oficiales tras el sumario impuesto al club azulgrana y a los dirigentes Raúl Zapag (Presidente) y Ariel Martínez (Secretario) de parte de la Asociación Paraguaya de Fútbol antes de recibir y acceder a todas las documentaciones pertinentes.
El órgano correctivo decidió investigar los hechos ocurridos frente a la casa de Robert Harrison tras la denuncia presentada por 53 clubes. Los incidentes sucedieron con posterioridad al partido disputado por Cerro Porteño y San Lorenzo el pasado 1 de mayo del 2019.
Tras el polémico encuentro en la Nueva Olla, en donde los árbitros legitimaron un gol fantasma contra el Ciclón, un grupo de aproximadamente 60 personas se manifestaron frente a la residencia del titular de la APF arrojando huevos y papel higiénico.
RENUNCIA. Un día después de producirse el grosero error de Cristian Aquino y sus ayudantes, el mandamás azulgrana convocó a una conferencia de prensa en donde leyó un comunicado en el que solicitó la renuncia inmediata del presidente de la Asociación Paraguaya de Fútbol, Robert Harrison, y del director de árbitros, Horacio Elizondo.
“A lo largo de este torneo Apertura fuimos perjudicados. Estamos viviendo el punto más bajo del arbitraje de la historia del fútbol paraguayo”, decía parte del documento.
SANCIÓN. El pasado 12 de junio, el Tribunal Disciplinario dio a conocer la sanción a los árbitros que validaron un gol fantasma el pasado 1 de mayo en La Nueva Olla.
El árbitro principal Cristian Aquino fue suspendido por 20 partidos oficiales, mientras que el asistente Diego Silva fue castigado por 30 compromisos. El segundo línea, Milciades Saldívar, no podrá estar en cinco encuentros.
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