Por Carlos Elbo Morales
–¿Qué ventaja representa en el tratamiento para la obesidad la manga gástrica?
–La mayor ventaja es que no se toca el intestino delgado. Se hace solamente la cirugía en el estómago, es menos costosa y compleja, permite que las vitaminas y los minerales se absorban normalmente en el intestino. Esto hace que se realice menos tiempo de anestesia, menor estadía hospitalaria y en algunas ocasiones incluso se puede dar el alta en menos de 24 horas.
–¿Cuál es la diferencia con el baipás gástrico?
–En el baipás gástrico se hace una cesión del intestino delgado y se une con el estómago. Eso significa que va a haber una disminución de la absorción de vitaminas, minerales, zinc, hierro. Con la manga gástrica no se realiza esa cesión, por lo tanto tiene mejor efecto en general. Los dos procedimientos producen la misma cantidad de pérdida de peso, por lo tanto la manga gástrica se considera la mejor opción frente a la otra
–¿Cuáles son las ventajas?
–Hay estudios científicos comparativos entre las personas que hacen dietas y ejercicios y la intervención. Se ha visto que los resultados de la cirugía son superiores a mantener solamente la dieta. Por este motivo, hoy en día es la primera opción para el tratamiento de las personas con obesidad. También la mortalidad es menor con este método.
–¿Cuál es el costo aproximado de esta intervención?
–Los costos varían de un país a otro. Es difícil establecerlo. En Estados Unidos puede llegar a situarse entre los 30.000 y 40.000 dólares. Pero el costo representa el mismo monto que un paciente abonaría durante tres años siguiendo otro tratamiento.
–¿Tiene alguna contraindicación?
–La mayor contraindicación estaría en la parte sicológica del paciente. Fuera de eso, no existe ningún impedimento para evitar someterse a una cirugía bariátrica.
–¿En qué consiste una cirugía bariátrica?
–Consiste en una intervención en la cual se trata que las personas muy obesas bajen de peso. En estas situaciones, además de ese problema, los pacientes podrían padecer de diabetes tipo II, hipertensión, problemas del corazón, colesterol alto. O sea, una serie de situaciones que demuestran que el caso va mucho más allá de la obesidad solamente.
–¿La cirugía es un tratamiento alternativo a la obesidad o representa una última alternativa?
–En general hay una tendencia en los pacientes a que tomen esta alternativa como última opción, por miedo. Pero siempre es mejor que la intervención se haga de manera precoz. Hay resultados que demuestran que cuando se ha realizado en el menor tiempo, se obtienen mejores beneficios. Si la obesidad está acompañada de otros problemas, estos se resuelven. Para las mujeres con mucho sobrepeso y que se someten a estas intervenciones antes del embarazo, contribuye a mejorar la gestación y el feto nace en mejores condiciones.
–¿Qué problemas acarrea la obesidad en el paciente?
–El sobrepeso está asociado a otras enfermedades como los problemas pulmonares, cardiacos, de las articulaciones, como en el hombro y la pelvis. También genera colesterol elevado. Afecta a los riñones a consecuencia de los problemas avanzados de la diabetes. La obesidad está asociada a un 30% de casos de cáncer de útero, mama, colon, recto.
–¿Cómo ve actualmente los tratamientos que se aplican en el mundo en la lucha contra obesidad?
–Comparando aquellas personas con las que no se operan, la calidad de vida es muy mala. Hay estudios que demuestran que al cabo de unos 20 años, el 100% de los pacientes que no se han operado vuelven a subir de peso. Con la cirugía se mantiene un peso apropiado por un periodo de tiempo mucho mayor y les da mayor calidad de vida. Se calcula que luego de la intervención se ha ganado ocho años de calidad de vida en los pacientes sometidos a la manga gástrica.
–¿Dentro de qué franja de edad se someten a esta intervención?
–Se la están realizando pacientes que promedian los 40 años. Pero también ya hay intervenciones quirúrgicas en personas de mayor edad y adolescentes.
–¿Qué ventajas representa desde el aspecto sicológico?
–Los efectos son muy positivos para quienes se han sometido a la intervención. Siempre se realiza una entrevista con los pacientes antes y después de entrar al quirófano. En el caso de los adolescentes se ven mejor, elevan su autoestima, que les beneficia para conseguir pareja o trabajo. Mejora la actividad sexual en los adultos. Los cambios van más allá y la persona se siente mejorada consigo misma.
–¿Qué puede hacer una persona que está interesada en esta intervención?
–Los pacientes pueden obtener toda la información en internet sobre la manga gástrica. Luego podrían interiorizarse con su médico para tomar la decisión de la operación. Posteriormente podrían conocer al equipo quirúrgico y averiguar sobre los resultados de las operaciones que han realizado.
–¿Qué avances tenemos en cuanto a cirugías menos invasivas en la actualidad?
–La laparoscopía (técnica exploratoria o diagnóstica que también se emplea para realizar intervenciones quirúrgicas a través de pequeñas incisiones, lo que permite que el paciente se recupere antes y mejor.), es la primera opción para la gran mayoría de los casos.
Para muy pocas ocasiones se utiliza la cirugía abierta, tal es el caso de los tumores muy grandes o de traumatismos abdominales severos. También en casos donde no se pueden resolver por vía laparoscópica. Pueden realizarse tratamientos combinados, haciendo uso de la robótica o endoscopía flexible junto con la laparoscopía.
–¿A qué apunta la tendencia en el campo de la cirugía?
–La tendencia sigue siendo utilizar procedimientos de mínima invasión porque la recuperación del paciente es mucho más rápida, el retorno a sus actividades es más rápido, hay menos dolor y menos hernias en el posoperatorio cuando es una intervención tardía.
–¿Lo que veíamos como ciencia ficción se está haciendo realidad?
–No sabemos cómo será el futuro en los próximos 25 años. Pero la tendencia es la intervención menos invasiva.
Fuente: Ultima Hora