El grupo de concepcioneros que se preparó para “recibir” a los grafiteros se topó cara a cara con el polémico Paraguayo Cubas. Pese a que en un momento estuvo caldeada la situación, acordaron que “Payo” podía volver a la ciudad, pero en abril.
No pasaron dos horas para que el polémico abogado Paraguayo Cubas fuera “escoltado” hasta las afueras de la ciudad de Concepción, donde tenía previsto pintar las casas de quienes considera corruptos: el ministro de la Corte Miguel Óscar Bajac y los diputados Alsimio Casco (ANR) y Ramonita Mendoza (PLRA).
Su arribo a la ciudad fue pasadas las 08:00 de este sábado. Atendiendo a que una turba echó ayer de Concepción a su amigo Rafael Esquivel, más conocido como “Mbururu”, resolvió que no haría hoy pintatas, pero sí dialogaría con algunos sectores de la sociedad.
Sin embargo, tras la conversación con algunos campesinos sin tierra, Cubas fue alteado frente a la catedral de la ciudad por el mismo grupo que expulsó de Concepción a “Mbururu”. Allí, la turba exigió a “Payo” que deje de insultar a las autoridades electas de la ciudad, refiriéndose a Bajac, Mendoza y Casco.
Cubas les pidió “permiso” para hablar en las radios locales sobre la corrupción en el país y la necesidad de reaccionar ante esa situación, a lo que el grupo le contestó que sí, pero el próximo mes, no este sábado, con previo aviso y pedido de permiso a éstos.
Con el fin de tranquilizar los ánimos, Cubas y su grupo decidieron cerca de las 10:00 dejar la ciudad, escoltados por agentes de la Policía Nacional y por personas que no querían la presencia del polémico abogado en el primer departamento del país, informó el corresponsal de ABC Color Aldo Rojas.
Desde el jueves último, un grupo de ciudadanos se había preparado con palos, honditas y petardos para “recibir” a los grafiteros e impedir que realicen las pintatas en la ciudad. Las amenazas las hicieron públicas a través de las redes sociales.
Cubas ya protagonizó otra “pintata” frente al domicilio del fiscal general del Estado, Javier Díaz Verón, episodio por el cual luego fue detenido junto a sus compañeros de causa. También protagonizó acciones en Ciudad del Este contra el “clan” Zacarías y el Poder Judicial de Alto Paraná, al que consideró servil al poder político.
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