El comisario Tomás Paredes Palma, subjefe de Investigación de Delitos de la Policía, y un oficial inspector fueron imputados ayer por el atraco a la sede del Partido Radical Liberal Auténtico (PLRA), tras el asesinato de Rodrigo Quintana. En la violenta aprehensión se dieron disparos a quemarropa contra personas escondidas en un sanitario. La Fiscalía solicita la prisión preventiva.
La fiscala Lorena Ledesma decidió imputar a Tomás Ramón Paredes Palma (47 años) por el hecho punible de inducción a un subordinado a cometer hecho punible, debido a que bajo su atenta dirección se cometió el atraco al sanitario de damas en el estacionamiento del local partidario, a las 0:22, del 1 de abril pasado.
En tanto que el oficial inspector Guido Armando Amarilla Vera (33), escopetero de la Agrupación Especializada, fue imputado por tentativa de homicidio doloso, debido a que rompió un vidrio y realizó disparos de balines de goma a corta distancia (quemarropa) y puso en peligro a las personas que se protegían en el lugar. Uno de ellos resultó ser el diputado liberal Eusebio Alvarenga. Para ambos imputados hay solicitud de prisión preventiva debido a que se exponen a la misma cantidad de años (de 5 a 15 años de pena privativa de libertad).
El juez penal de garantías N° 5 de Capital, Alcides Corbeta, que atiende la causa principal del suboficial ayudante Gustavo Florentín, imputado por el asesinato del joven dirigente liberal de La Colmena, Rodrigo Quintana, será quien determine el lugar de reclusión de los hoy imputados.
“Disparos pudieron ser mortales”
La fiscala Lorena Ledesma indica en su escrito de imputación, que los disparos de balas de goma, realizados por el oficial Guido Amarilla para acceder al baño de damas donde estaban resguardadas unas ocho personas, pudieron resultar mortales al ser a corta distancia.
“El efectivo policial de la Unidad Antidisturbios que habría realizado tres disparos de balines de goma con su escopeta, sería Guido Armando Amarilla Vera, quien se habría (percatado de) la presencia de varias personas dentro del baño y que de acuerdo con la distancia, cantidad y trayectoria, los disparos podrían causar lesiones mortales de al menos una persona, teniendo la posibilidad de realizar al menos un acto para contrarrestar esa acción, vale decir, evitar que las balas impacten en las personas”, dice la investigadora.
Con respecto a la tarea que le cupo a Paredes Palma, Ledesma indicó que en el interior del PLRA “habría dispuesto a sus agentes policiales que les sujeten a las personas, dirijan al patio del estacionamiento y acuesten boca abajo”.
Sobre el accionar de Amarilla, dijo que en ese momento era su superior y permitió que rompiera el vidrio del baño, introduzca su escopeta y realice disparos.