Un cargamento de una tonelada y media de pollo de contrabando, unos cuatro mil kilos de azúcar, quinientos litros de aceite, entre otros productos, también ingresados en forma ilegal al país, fueron confiscados en operaciones conjuntas efectuadas por agentes del departamento Contra Delitos Económicos de la Policía, Departamento Técnico Aduanero de Vigilancia Especial (Detave) y del Ministerio Público, en la ciudad de Caaguazú.
La comitiva encabezada por el fiscal Eugenio Ocampos allanó en forma simultánea cuatro depósitos instalados en las inmediaciones del mercado municipal de la ciudad, cuyos propietarios fueron individualizados y ya están procesados por el delito de contrabando.
De acuerdo al fiscal Ocampos, estos comerciantes traen en grandes cantidades las mercaderías de contrabando desde el Brasil y luego las distribuyen a los pequeños comerciantes instalados en la zona comercial de la ciudad, hecho que les genera multimillonarias ganancias y causa enorme perjuicios a las empresas nacionales.
El primer procedimiento se realizó en un depósito de material cocido (sin denominación) con portón de acceso metálico, ubicado sobre la calle Bernardino Caballero y Cerro Corá.
Los siguientes se efectuaron en locales comerciales en la citada ciudad, de donde se incautaron mercaderías presumiblemente ingresadas de contrabando. Entre ellas: 1.440 kilos de muslos de pollos, en 72 cajas; 220 kilos de embutidos (fiambres), 3.893 de azúcar y 505 litros de aceites, en 28 cajas de 12 unidades de 1,5 litros.
Acompañaron los trabajos funcionarios del Detave, agentes de la División Especializada Contra Delitos Económicos y del puesto de control Torín.