La Administración Nacional de Electricidad (ANDE), gracias a la aplicación de su programa de detección de conexiones eléctricas irregulares en este departamento, tuvo una recaudación de 1.113 millones de guaraníes en los primeros cuatro días del operativo denominado “Plan anual de Reducción de Pérdidas”, que se está llevando a cabo en Caaguazú.
Esa “cacería” de las instalaciones clandestinas se inició el lunes 24 del presente mes y hasta el viernes último la citada empresa estatal logró descubrir 568 conexiones irregulares en los distritos de Coronel Oviedo, Caaguazú y Campo 9, según informaron sus voceros.
Se estima que en el departamento existirían unas 10.000 instalaciones no declaradas con el sistema de distribución de la estatal. Con la intención de detectarlas, la ANDE integró 17 cuadrillas de verificadores, compuestas por técnicos especializados, los que a su vez cuentan con la compañía de asesores jurídicos, policías y agentes fiscales en las intervenciones.
Hasta ayer, aseguran los intervinientes, no se ha registrado ningún incidente.
El Lic. César Zena de la ANDE comentó que los trabajos están teniendo un éxito total y que gracias a las regularizaciones que produce el operativo de referencia estaría mejorando inclusive la estabilidad eléctrica para los usuarios.
Muchas de las conexiones que pudieron verificar consisten en precarios ganchitos que cuelgan de las líneas de la empresa pública, que sumados al consumo real provocan continuas variaciones de tensión en el flujo eléctrico, explicó dicho vocero de la ANDE.
El operativo oficialmente seguirá hasta el viernes 4 de agosto próximo, no obstante, considerando que hay un alto número de conexiones irregulares, los trabajos se extenderían durante todo el mes de agosto, se pudo saber. Operativos con similares características ya fueron realizados por las cuadrillas de la compañía proveedora en los departamentos Central, Alto Paraná e Itapúa, donde sí hubo incidentes.
En 2015, según fuentes técnicas del sector, la ANDE perdía un 25,3% del total. Un desglose de esta cantidad permite concluir que en el área de distribución sus desperdicios ascienden al 19,1%, en tanto que en sus líneas de transmisión derrocha un 6,2% del total.