Productores frutihortícolas reunidos ayer con autoridades del Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG) dijeron que se encuentran asfixiados por el contrabando pues los organismos de control del Estado no atajan el comercio ilegal.
El Ing. Máximo González, productor frutihortícola de Vaquería y secretario de la Asociación de Frutihortícolas de Caaguazú, dijo ayer que productos de contrabando llenan el mercado nacional, especialmente ingresados ilegalmente de la Argentina y en las últimas semanas, desde el Brasil.
“Tenemos muchos encuentros y reuniones en la lucha contra el contrabando con diferentes organismos y no funcionan los órganos de control, específicamente en cuanto al ingreso ilegal de productos frutihortícolas a nuestro país”, expresó.
En las fincas hay abundante tomate, que en muchos casos se pudren porque no se puede comercializar, y los contrabandistas “ofrecen el tomate a G. 2.000 el kilo y el locote a G. 500 y G. 700 el kilo”, lamentó la fuente.
En la reunión de ayer en el MAG, exigieron que haya más control a fin de evitar el ingreso ilegal de productos que abundan en el país.
Señaló que la semana pasada presentaron una nota de pedido de audiencia con el Presidente de la República, a fin de exponerle la crítica situación de los productores frutihortícolas como consecuencia del contrabando.
Espera que en esa reunión, el Presidente Mario Abdo Benítez le “pegue” una sacudida a sus funcionarios a fin de optimizar los controles en los puestos fronterizos y proteger de esa manera la producción nacional.
También mencionó a “viejos bueyes y funcionarios eternos” del Servicio Nacional de Calidad y Sanidad Vegetal y de Semillas (Senave), que siguen en sus puestos y crean inconvenientes a la hora de gestionar documentos. Señaló que en los puestos fronterizos esos “viejos bueyes” se confabulan con contrabandistas y facilitan documentos de compras de productos ilegales como si fueran de nuestro país.
Por su parte, el titular del MAG, Denis Lichi, dijo que el contrabando de frutihortícolas es una preocupación. “Nos preocupa bastante, se estuvo controlando un tiempo y a partir de las fiestas de Navidad comenzaron a ingresar nuevamente. Vamos a estar moviéndonos, hablando con los organismos de control encargados para cuidar eso y podamos proteger nuestra producción nacional”, dijo.
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