El 1 de Junio de 2001, se celebró por primera vez, el Día Internacional de la Leche, el cual fue establecido por la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) con el propósito de incentivar el consumo de productos lácteos en todo el mundo.
Bernie Friesen, Gerente General de Lactolanda, señaló que la estabilidad política, siempre tan anhelada, es en gran medida una garantía de un ambiente económico más seguro
El consumir leche siempre se ha considerado un alimento esencial para la etapa del desarrollo y crecimiento, pero también es de gran utilidad a lo largo de toda la vida.
Hoy que se conmemora su celebración, el país y el mundo se encuentra luchando ante una pandemia nunca vista por esta generación y el sector lechero paraguayo sigue trabajando con mucha fuerza, buscando cumplir sus metas y abastecer las necesidades de la población.
“A pesar de la situación en la que nos toca vivir, la industria láctea en general, en especial Lactolanda, se encuentra en un proceso ascendente de producir y lanzar al mercado productos que son requeridos por el consumidor. Requerimiento que a la larga se vuelve casi como una exigencia, la cual Lactolanda responde con calidad y responsabilidad, porque sin lugar a dudas estamos viviendo una transición en la cultura del consumo de productos lácteos, es decir, hay más conciencia sobre la importancia de su consumo”, destacó Bernie Friesen, Gerente General de Lactolanda.
Señaló que de acuerdo al último registro el promedio de consumo de leche en el país subió a 130 litros anuales per cápita, no obstante, la recomendación de la FAO (La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura) es de 180 litros. Sin embargo, esta cifra ya se encuentra por encima del promedio mundial que es de 110 litros per cápita.
Con relación a la forma que afrontan la pandemia, respondió: “Nos hizo ver cuán importante es una vida sana desde la alimentación; no es un concepto nuevo, pero es necesario que a la industria láctea se la valore aún más, en el sentido de estar plenamente conscientes de lo que produce y ofrece, y que es básicamente salud.
De alguna manera nos propusimos y logramos seguir vinculados con nuestros consumidores a través de un tono de comunicación positivo y de una imagen saludable”.
Friesen, manifestó que esperan mayor estabilidad por parte de las autoridades. “En un tiempo tan difícil como éste, creemos que la estabilidad política, siempre tan anhelada, es en gran medida una garantía de un ambiente económico más seguro. Un país transparente en sus gestiones es un país sano. La industria láctea aporta lo suyo, y espera que el gobierno de turno sepa valorar y administrar ese esfuerzo”, sostuvo.
750 mil litros de leche en polvo diarios
El gerente destacó que sigue trabajando en la ampliación de la fabrica de leche en polvo, cuyas obras están previstas su finalización en este 2021.
“Prosigue en su fase final la obra de ampliación del área de fabricación de la leche en polvo, que se estima concluya este año; es una obra que requiere un esfuerzo económico muy importante. Se proyecta una infraestructura que incluye una tecnología de punta, de última generación. Con esta nueva área se llegará a 750 mil litros de producción diaria de leche en polvo”, comentó.
Agregó que Lactolanda, como marca líder, y como tal, exige permanentemente proyección e innovación. “Adecuarse al gusto del consumidor, cumplir con sus exigencias, y para eso lo importante es contar con una infraestructura de primer nivel, con colaboradores capacitados, honestos y sumamente competentes. Estamos trabajando con nuevos productos que, sin lugar a dudas, serán una grata sorpresa”, dijo.