La violencia contra la mujer continúa siendo una de las problemáticas más graves en Paraguay. Según los últimos datos publicados por la Dirección de Transparencia y Acceso a la Información del Ministerio Público, entre enero y octubre de 2024 se registraron 30.898 denuncias de violencia familiar, lo que representa un promedio de 100 víctimas por día. Esta cifra refleja un preocupante aumento en la cantidad de mujeres que enfrentan situaciones de abuso y violencia en el país, con una significativa parte de estas víctimas siendo mujeres adultas, menores de 13 años y personas mayores.
Feminicidios y Tentativas: Un Año Trágico
En cuanto a los feminicidios, 27 mujeres han sido asesinadas este año, mientras que 40 tentativas de feminicidio fueron reportadas, lo que muestra una constante amenaza a la vida de las mujeres. Además, se han registrado 3 víctimas de violencia vicaria, una forma extremadamente cruel de abuso donde los agresores matan a los hijos para infligir un mayor sufrimiento a las madres tras una ruptura de relación o cuando estas se niegan a mantener un vínculo.
La violencia vicaria, que utiliza a los seres queridos de la mujer como arma para causarle dolor, ha emergido como una de las formas más desgarradoras de violencia, y resalta la necesidad urgente de implementar medidas más efectivas para proteger a las mujeres y sus familias.
Impacto Familiar: 58 Huérfanos por Feminicidio
Un dato particularmente impactante es el de los 58 hijos huérfanos por feminicidio en lo que va del año, lo que pone de relieve el devastador impacto que estos crímenes tienen no solo en las víctimas directas, sino también en los niños y adolescentes que quedan atrapados en el ciclo de violencia.
La composición de los casos de feminicidio revela que el 55% de las víctimas fueron asesinadas por sus parejas, mientras que el 34% lo fueron por ex parejas. Además, se ha identificado a un padre y un ex yerno entre los agresores, así como a otros casos aún por esclarecer.
Aumento Preocupante de Denuncias de Violencia Familiar
La violencia familiar también sigue aumentando de forma alarmante. De las 30.898 víctimas registradas hasta octubre, la mayoría son mujeres adultas (30.044), pero también se incluyen 383 menores de 13 años y 471 adultos mayores. De acuerdo con las estadísticas, el 66% de las víctimas son mujeres entre 20 y 49 años. Este dato evidencia que la violencia familiar afecta predominantemente a mujeres en la etapa reproductiva y laboral.
El aumento de casos es claro al comparar las cifras con años anteriores. En 2015, el Ministerio Público recibió 10.164 denuncias de violencia familiar. Para 2024, esa cifra ha ascendido a 30.898, lo que representa un incremento del 243% en casi una década. Este crecimiento refleja no solo un aumento en la violencia, sino también una mayor disposición de las víctimas para denunciar los abusos.
Zonas con Mayor Incidencia de Violencia
Las regiones con mayor cantidad de denuncias de violencia familiar y feminicidios en 2024 son Central, Alto Paraná, Amambay, y Canindeyú. Además, departamentos como Caaguazú, Itapúa, San Pedro y Cordillera también han reportado altas cifras de abuso y violencia.
Este patrón geográfico resalta la necesidad de una mayor intervención estatal y de políticas públicas enfocadas en las áreas más afectadas, con énfasis en la prevención y en la atención inmediata a las víctimas.
Respuesta Institucional y Retos para el Futuro
El Ministerio Público, a través de su Plataforma de Datos Abiertos, sigue registrando un número creciente de denuncias, lo que demuestra tanto la creciente visibilidad de la violencia de género en la sociedad como la desconfianza histórica en las instituciones encargadas de proteger a las mujeres. Si bien se han implementado políticas y medidas para enfrentar esta crisis, el número elevado de víctimas pone de manifiesto que la respuesta institucional aún no es suficiente para frenar la violencia.
Las autoridades y organizaciones de derechos humanos hacen un llamado urgente a la ciudadanía y a las instituciones del Estado para intensificar esfuerzos en la lucha contra la violencia de género, especialmente en la prevención de feminicidios y la protección de las víctimas en riesgo. La educación, el fortalecimiento de los servicios de atención a víctimas y un mayor apoyo a las mujeres en situación de vulnerabilidad son esenciales para combatir este flagelo social.
Un Llamado a la Acción
En este contexto, es crucial seguir impulsando campañas de sensibilización, formación en derechos humanos, y protocolos de actuación tanto para las fuerzas de seguridad como para los profesionales de la salud, la justicia y el sistema educativo, con el fin de garantizar una sociedad libre de violencia y un futuro más seguro para las mujeres y niños de Paraguay.
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