Coronel Oviedo, 25 de noviembre de 2024. – En una medida de protesta que ha captado la atención de la comunidad educativa y autoridades locales, un grupo de aproximadamente 20 alumnos del 1ro y 2do año de la media del Colegio Nacional Dr. Pedro P. Peña de Coronel Oviedo, ha tomado las instalaciones del establecimiento exigiendo la destitución del director general Jorge Servín. Los estudiantes denuncian maltratos constantes, prepotencia, un desempeño deficiente en la gestión y la mala distribución de recursos dentro de la institución.
Reclamos por condiciones precarias
Los estudiantes manifestaron su descontento debido a diversas situaciones que, según ellos, afectan negativamente su experiencia educativa. A lo largo de este año, han tenido que enfrentar aulas sin sillas suficientes, ventiladores inoperativos, acondicionadores de aire que no funcionan, la falta de iluminación adecuada para estudiar y problemas con los bebederos de agua potable. Además, aseguran que sus constantes reclamos ante la dirección han sido ignorados, y que incluso se les ha prohibido plantear quejas en la Secretaría del colegio.
Los alumnos, en un acto que califican de urgente, han decidido tomar el colegio como medida de presión. Anunciaron que presentarán una denuncia formal por maltrato ante el Ministerio de Educación y Cultura (MEC) y el Juzgado de la Niñez y Adolescencia para que se investigue la gestión del director y las condiciones en las que se desarrollan las clases.
Reacciones de las autoridades
El jefe de la Comisaría Primera de Coronel Oviedo, Nicolás Giménez, indicó que los estudiantes deben recurrir a los canales correspondientes para que sus reclamos sean atendidos de manera formal, señalando que el procedimiento adecuado es esencial para garantizar que sus voces sean escuchadas sin causar alteraciones al orden público.
Por su parte, la asesora externa del Departamento de Asesoría Jurídica del MEC indicó que se cumplió con todo el protocolo correspondiente para abordar la situación. La asesora confirmó que se informó a las autoridades pertinentes, incluyendo al Ministerio Público, la Defensoría del Pueblo y la Defensoría de la Niñez y Adolescencia, quienes se encargarán de dar seguimiento a la denuncia presentada por los estudiantes.
Aclaraciones del Director Departamental de Educación
El Director Departamental de Educación, Ariel López, se acercó a la institución para dialogar con los estudiantes y se reunió con un grupo de alrededor de 60 alumnos, entre los que también se encontraban alumnas, lo que le generó preocupación. López destacó que, tras escuchar las quejas, les sugirió que realizaran una nota formal de reclamo dirigida al director del colegio, la cual debe ser enviada a la supervisión educativa y luego derivada a la Dirección Departamental de Educación para su respectiva investigación.
El director departamental subrayó que para llevar adelante un procedimiento administrativo se requiere de evidencia que respalde las denuncias. En caso de que se constate un mal desempeño del director, este debería someterse a un sumario administrativo, mientras se designa un director interino.
Controversia sobre la conducta de algunos estudiantes
En medio de la tensión, uno de los aspectos que más llamó la atención fue el comportamiento de ciertos estudiantes involucrados en la toma. Según una docente de la institución, uno de los jóvenes que participó en la protesta es un alumno que no asiste regularmente a clases. La situación fue tan problemática que se convocó a los padres de los estudiantes para tratar de encontrar una solución, pero ninguno de ellos se presentó a la reunión, lo que para algunos generó dudas sobre el apoyo familiar a la protesta.
El director Ariel López también expresó que le parecía llamativo que los padres no hayan acudido a la cita convocada por la escuela, lo que plantea interrogantes sobre el nivel de involucramiento de las familias en la educación de sus hijos y en los problemas que surgen dentro de la institución.
Medidas de fuerza continuarán
A pesar de los esfuerzos de las autoridades para mediar en el conflicto, los estudiantes han manifestado que continuarán con su medida de fuerza hasta que se resuelvan sus demandas. El reclamo no solo es por la destitución del director, sino por una mejora significativa en las condiciones materiales del colegio y una gestión más eficiente y cercana a las necesidades de los alumnos.
El caso resalta la preocupación por la falta de diálogo efectivo entre las autoridades educativas, los estudiantes y sus familias, y subraya la importancia de resolver los conflictos de manera institucional para garantizar una educación de calidad y un ambiente escolar seguro y adecuado para todos.
El futuro de la situación dependerá de las decisiones que tomen las autoridades pertinentes, quienes deberán equilibrar la resolución del conflicto con el respeto a los derechos de los estudiantes y la comunidad educativa.
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