El gobernador de Mato Grosso del Sur, Reinaldo Azambuja, indicó en una entrevista publicada en el diario Folha de Sâo Paulo que ante los graves perjuicios que trae consigo el tráfico de drogas a su Estado sería conveniente cerrar sus fronteras.
El gobernador del Estado de Mato Grosso del Sur, Reinaldo Azambuja, indicó que ante los graves perjuicios que trae consigo el tráfico de drogas a su Estado sería conveniente cerrar las fronteras de Mato Grosso del Sur con Bolivia y Paraguay.
El gobernador Azambuja dijo que el Estado de Mato Grosso del Sur gasta más de 127 millones de reales por año en el mantenimiento de los presos por narcotráfico en su Estado.
Señaló que la construcción de más presidios para albergar a los presos por narcotráfico no es la solución definitiva. “Nuestras fronteras están rebasadas y los narcotraficantes han potencializado al Estado de Mato Grosso del Sur en un corredor de drogas y armas”.
El mandatario dijo que los altos índices de crímenes registrados en las fronteras no solo estrangulan al sistema carcelario, sino que también contribuyen a la corrupción en el sistema judicial. Ante esta situación, el gobernador Azambuja defiende el cierre de la frontera con ciudades paraguayas y bolivianas que hacen frontera con el Estado de Mato Grosso del Sur.
“Hay que atacar el mal por la raíz; cerrando nuestras fronteras, estaremos cerrando la entrada de drogas y armas. Además, esa medida sería más eficaz que las actividades de las fuerzas operativas de la policía en la frontera», expresó
De acuerdo con el informe oficial del Estado de Mato Grosso del Sur, en operativos realizados por las fuerzas policiales del estado en los últimos seis años, las aprehensiones de drogas subieron de 87 toneladas a 427 toneladas.
Azambuja indicó que ante estas cifras se nota la ineficacia de la lucha contra las drogas y remarcó que además de perder ante este flagelo, el Estado podría utilizar los cientos de agentes policiales que hoy cubren las fronteras para dar seguridad a las ciudades del Estado. Actualmente existen en las penitenciarias de Mato Grosso del Sur casi ocho mil presos por narcotráfico.
Llamativamente, el gobernador Azambuja, ”olvida” que el Brasil, y en una gran proporción el estado de Mato Grosso del Sur, es la responsable de exportar miembros de grandes bandas de sanguinarios narcotraficantes que hoy operan en las ciudades paraguayas y bolivianas fronteriza con el Brasil.
La banda criminal del Primer Comando da Capital (PCC) y el Comando Vermelho (CV) han sentado raíces en las ciudades paraguayas fronteras con el Brasil y son responsables del envío de toneladas de marihuana y cocaína al mercado brasileño gracias a la corrupción imperante en ambos lados de la frontera.
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