La compañía estadounidense Tesla confirmó que el vehículo Model X que chocó contra una barrera en EEUU el pasado 23 de marzo, causando la muerte del conductor, tenía activado el sistema automático.
En el comunicado, Tesla explica que el sistema automático estaba activado y que el conductor Walter Huang, de 38 años, puso las manos en el volante solo seis segundos antes del accidente, por lo que no logró evitar que el auto chocara contra una barrera de una carretera en Mountain View, California.
Huang, que trabajaba como un ingeniero para Apple, murió poco después del accidente en un hospital cercano.
El sistema de conducción automático es capaz de frenar y acelerar como si de un conductor se tratara y, además, permite a los pilotos retirar sus manos del volante durante periodos prolongados de tiempo, aunque Tesla específicamente exige a sus usuarios que mantengan «en todo momento» las manos en el volante.
La muerte de Huang, la primera de un conductor de un vehículo de Tesla en automático, ha generado dudas sobre la seguridad de estos sistemas de conducción.
El pasado 18 de marzo, un vehículo autónomo de la compañía de transporte Uber atropelló y mató a una mujer en Tempe (Arizona, EEUU).
En reacción a ese suceso, Toyota suspendió las operaciones con vehículos autónomos que tiene en el área de San Francisco (California) y en Ann Arbor (Michigan), donde está ubicado su centro de investigación.