La fiscala Irma Llano manifestó que aumentaron los números de «ciberestafas» en nuestro país, por lo que pidió tomar precauciones. El modus operandi es variado, pero en la mayoría de las veces piden datos o acceso a códigos.
En los últimos años aumentaron masivamente las modalidades de estafas, según destacó la fiscala Irma Llano. Citó, por ejemplo, que una de las más comunes es en la que solicitan informaciones personales, supuestamente a fin de actualizar la base de datos de las empresas, ya sea por correos, mensajes o llamadas, y allí ingresa un “malware malicioso”.
Teniendo en cuenta que hoy en día la mayoría utiliza su teléfono celular o sus notebooks para acceder a todas sus cuentas, el ingreso de ese malware posibilitaría el acceso a todas ellas, explicó la fiscala.
También comentó que hay un sistema mediante el cual les llaman para decir que son de una empresa, cooperativa o banco al cual se ha asociado la víctima y les piden que manden un código. Al facilitar ese dato a los estafadores, estos tendrán acceso a todas sus bancas y podrán hacer transferencias.
“Nadie te regala porque sí nomás dinero, la gente tiene que tomar conciencia de eso”, destacó la fiscala e instó a las personas a tener cuidado con este tipo de llamadas o correos electrónicos en los que ofrecen premios a cambio de algo.
“La tecnología es importante, pero debemos empezar a tomar las debidas medidas de seguridad para resguardar la privacidad e identidad digital”, exhortó.
ESTAFADOS CON UNA CUENTA DE BRUJERÍA
En otro momento, la fiscala destacó uno de los casos más emblemáticos que recuerda: el de una estafa realizada con nombres de usuarios paraguayos en una página web donde ofrecían servicios de brujería.
Hubo más de 250 estafados. “Les hacían hacer ciertos rituales, la mayoría sexuales”, mencionó. Los que “contrataban los servicios” debian grabarse teniendo relaciones sexuales y mandar los videos al grupo; una vez que lo hacían, empezaban a ser objetos de extorsión para evitar que se difundan las imágenes, según explicó.
Llano destacó que hasta US$ 25.000 llegaron a transferir las personas extorsionadas. En total, este caso generó una pérdida de más de US$ 1.000.000 a nivel internacional, con víctimas de todo el mundo. Un argentino fue detenido por el caso y, según los datos de la Fiscalía, las identidades de los paraguayos habrían sido usurpadas para la creación de la página web.