La familia de Elías Ramírez, el niño de 12 años que falleció este miércoles tras ser picado por un alacrán, solicitará una investigación exhaustiva a los sanatorios donde el pequeño fue atendido por supuestas irregularidades en el caso.
En conversación con Chaco Boreal 1330 AM, señalaron que la situación en la que falleció el niño es muy extraña, siendo que se le aplicaron varias ampollas de antídoto.
Manifestaron que los médicos no sabían qué tipo de alacrán picó al niño, por lo que supuestamente le pusieron un antídoto para todo tipo de escorpiones, pero no para la especie en específico del que atacó a Elías.
Indicaron que una vez ingresados al hospital, los médicos mandaron traer tres ampollas de antídotos, pero que al principio solo le aplicaron al niño dos y una vez ingresado a terapia, cuando se encontraba con un cuadro grave, le aplicaron la tercera ampolla.
Asimismo, relataron que cuando el niño no presentaba mejoras y su cuadro empeoró, le volvieron a aplicar otras tres ampollas de seguido.
“Tenemos todas las ampollas que usaron (…) nos dijeron que podía aguantar hasta 10 ampollas. Hay muchas cosas que no cierran”, señaló Marcos Ramírez, padre del niño.
Agregaron que las investigaciones que solicitarán son para averiguar qué pasó realmente con Elías y si el actuar de los profesionales fue la correcta o se cometió algún tipo de negligencia médica.
Niega negligencia
Por su parte, la ministra de Salud, María Teresa Barán, negó que en el caso de Elías se haya cometido algún tipo de negligencia médica.
Manifestó que en este caso, posiblemente la acción de las ampollas que se le aplicó no tuvo el efecto esperado, por lo cual se dio el deceso del menor.
Indicó que el menor ingresó a un centro privado y de manera inmediata se contactaron con el Ministerio de Salud para solicitar el antídoto.
Resaltó que la cartera sanitaria cuenta con un sistema de alerta para este tipo de casos y se que actuó de manera rápida.
Recordó que el niño fue trasladado al Hospital Pediátrico Niños de Acosta Ñu debido a que su cuadro no mejoró.
Recalcó que el antídoto no tuvo la eficacia que se esperaba y que esto puede ocurrir por varios factores y que se debe tener en cuenta, la cantidad de veneno inoculado y el estado de salud del paciente.
El caso
El niño falleció este miércoles luego de permanecer varios días internado en terapia intensiva del Hospital General Pediátrico Niños de Acosta Ñu.
La familia del mismo decidió donar los órganos del menor, que son dos riñones y las corneas.
Dos son pacientes del Hospital Central del Instituto de Previsión Social (IPS) recibirán los riñones.
Se trata de un joven de 17 años y una mujer de 36 años, que esperaban esta oportunidad para mejorar su calidad de vida.
Mientras que las córneas del donante, extraídas por la Fundación Visión, se preservarán y serán implantadas a pacientes para mejorar su calidad de vida.
Por su parte, el Ministerio de Salud Pública y Bienestar Social, a través del Hospital General Pediátrico Niños de Acosta Ñu, de San Lorenzo, lamentó el fallecimiento del niño.
“La institución extiende las más sentidas condolencias a los familiares y valora el acto de amor de los padres que, aún en una situación tan dolorosa, han tomado una decisión que ayudará a salvar vidas”, sentenció en sus redes sociales.
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