Las quejas se volvieron un modo de vida
“La gente se queja mucho, pero se acobarda a la hora de actuar. Quiere que todo cambie, pero se niega a cambiar”, dice Paulo Coelho. Diariamente ves que tus amigos protestan por la inseguridad, la economía, los partidos políticos o, simplemente, porque es lunes y tienen que trabajar. Te percatás de que no es la primera vez que sucede y ya se tomaron el hábito de plaguearse. Ante esto te preguntás: ¿será que hacen algo más que solo sentarse a reclamar por todo?
Es verdad que todos tenemos derecho a opinar y dar a conocer nuestras molestias. Por lo tanto, no está mal que las personas manifiesten sus diversas inquietudes, pero ¿qué hacen para tratar de mejorar las situaciones que las incomodan?, ¿intentan hacer algo nuevo para obtener resultados distintos?
Es cansador observar y escuchar cómo algunos conocidos se deleitan buscando algo para quejarse, y ven solo el lado negativo de las cosas. Tal vez saben que plaguearse no cambiará la situación, pero simplemente les agrada hacerles saber a los demás que no están de acuerdo con ciertos hechos o, quizás, quieren que te unas a su indignación.
En tu Facebook ves que protestan hasta por la contaminación ambiental, pero ¿en el día, por lo menos, se tomaron la molestia de tirar sus deshechos al basurero? Sería más productivo que empiecen a dar el primer paso para crear conciencia a su alrededor y no solo buscar culpables ante este tipo de hechos.
Si bien es cierto que en algunos casos la queja es un modo de desahogo ante los pesares, esto no soluciona nada. Publicar en tu red social un reclamo por ser lunes y tener que ir a trabajar, no hará que tu jefe te llame y diga: “Tomate el día libre”. Así que utilizá tu tiempo buscando resultados, sacá provecho a las diversas situaciones que te incomodan y disfrutá las pequeñas cosas buenas que te regala la vida.
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