Las agentes fiscales Teresa Martínez y Nathalia Acevedo San Martin, de la Unidad Especializada en la Lucha contra la Trata de Personas, Explotacion Sexual en Niños, Niñas y Adolescentes, intervinieron este viernes, mediante orden judicial, dos sitios donde presuntamente se explotaban sexualmente a mujeres, en los distritos de Nueva Toledo y Vaquería del departamento de Caaguazú.
El operativo en el bar Albano, situado en Nueva Toledo, estuvo encabezado por la fiscal Acevedo San Martin, con apoyo de agentes policiales Antitrata Regional Caaguazú. En el lugar se constató la presencia de una adolescente de 17 años, quien fue rescatada por la comitiva fiscal, junto a funcionarios de la Secretaría de la Niñez y la Adolescencia y trasladada hasta un albergue en Asunción. La menor es oriunda de la localidad de Bella Vista Norte, Concepción.
De acuerdo a los datos, las mujeres explotadas sexualmente también eran trasladadas hasta el lugar provenientes de otras zonas. Se incautó dinero en efectivo y documentos, aparato celular y cuaderno de registro.
Asimismo, se ordenó la detención de los presuntos responsables del lugar, Elede Paini Kempf y Albano Kempf. Éstos prestaron declaración indagatoria y fueron imputados por la supuesta comisión de los hechos punibles de proxenetismo, y trata de personas con fines de explotación sexual y laboral. La representación fiscal solicitó su prisión preventiva.
En la ciudad de Vaqueria, el allanamiento estuvo a cargo de la fiscal Martínez con apoyo de la Policia Antitrata de Asunción. Fue detenida la propietaria del sitio, Bacilisa Antonia Espínola Villamayor, quien fue imputada por la supuesta comisión de los hechos punibles de trata de personas y rufianería y se pidió al Juzgado Penal de turno se dicte su prisión preventiva.
El local funcionaba bajo la fachada de un copetín con el nombre de «Ña Antonia». De allí se incautaron aparato celular, cuaderno de registros con nombres de las mujeres que estarían en situación de explotación y otros elementos que hacen a la explotación sexual, como preservativos y documentos varios. En el lugar se hallaba una mujer víctima oriunda de Ciudad del Este, Alto Paraná. Aparentemente, cobraba por los servicios la suma de G.80.000 de los cuales 50.000 debía entregarse a la encargada.