Beto Ovelar realiza fuerte operativo en busca de la bendición de Cartes

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Intenso lobby. Silvio Ovelar conversa con su correligionaria Blanca Ovelar. Cerca de ellos, Víctor Bogado y Luis Castiglioni.

El líder de Colorado Añetete en el Senado, Silvio Ovelar, estuvo procurando desde inicios de este año lograr la bendición del presidente Horacio Cartes para su elección como presidente del Congreso a partir de julio próximo.

Como parte de su proyecto personal, estuvo más bien operando a favor de los intereses de los cartistas, incluso por encima de los de su propia bancada en la Cámara Alta.

La primera postura que llamó la atención fue cuando se definió el acuerdo para la Fiscalía General del Estado, aprobando a la candidata del Ejecutivo, Sandra Quiñónez.

Dos miembros de Colorado Añetete, Enrique Bacchetta y Óscar Salomón, votaron a favor, cuando la decisión supuestamente era postergar el acuerdo.

Ovelar quiso aparentar que estaba sorprendido por lo ocurrido, pero no se atrevió a cuestionar a sus colegas por salir de la línea del bloque.

Sin embargo, no tuvo la misma actitud cuando se tenía que definir la vacancia en la vicepresidencia de la República dejada por Juan Afara.

El senador oriundo de Caaguazú no tuvo contemplaciones con su correligionario Eduardo Petta, cuando este se opuso a la designación de la ex ministra de la Corte Alicia Pucheta, elegida de Cartes.

Es más, el propio líder de la bancada que responde al presidente electo Mario Abdo Benítez lideró las negociaciones para que el mandatario consiga los votos para el juramento de Pucheta.

Ovelar despotricó duramente contra Petta por no alinearse y por reclamar que no se haya hecho una reunión de bancada para tomar una postura.

Este último incluso consideró llamativa la posición del líder de su bancada por su sumisión al cartismo.

Ante la presión, finalmente Añetete se reunió y votó en mayoría por la favorita de Cartes, y tampoco se presentó otra candidatura.

El único colorado que se abstuvo y se tuvo que respetar su decisión fue Petta.

PROBLINDAJE. Otra postura que llamó la atención fue que Ovelar haya acompañado el cerrojo a la pérdida de la investidura parlamentaria.

Votó a favor del proyecto problindaje nuevamente junto a Bacchetta y Salomón.

La última hazaña del ex disidente que prácticamente lo dejó en evidencia como aliado del cartismo fue su ausencia de la sesión pasada en el momento en que se tenía que definir el proyecto de aumento de impuesto al tabaco, donde cada voto era decisivo.

Minutos antes se lo vio al parlamentario recorriendo las diferentes bancas y conversando con varios senadores de distintos partidos políticos.

Finalmente, sus propios compañeros de bancada, entre ellos Óscar Salomón, confirmaron su pretensión de presidir el Congreso. Ovelar había sido sancionado por 60 días tras ser filmado comprando cédulas, y quedó con el mote de trato apu’a.

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