Hasta el momento no se sabe si es un mito o una realidad, pero los panificados son el enemigo número uno de quienes quieren bajar algunos kilos, sin embargo, no todo lo que se dice es cierto.
Con respecto al pan, refiere que es un alimento rico en hidratos de carbono -como lo es el arroz, la papa y las pastas- , contiene nutrientes esenciales para el organismo y constituye la base de la olla alimentaria.
Sin embargo, aclaró que si se consume adecuadamente, una porción en el desayuno y/o la merienda no contribuye a la suba de peso.
«Lo que aumenta las calorías del pan es lo que le acompaña: mermeladas, mantecas, salsas, embutidos», aclaró.
Para llevar una alimentación saludable, es importante mantener un equilibrio e incluir alimentos de los diversos grupos, como cereales, tubérculos y derivados, frutas, verduras, lácteos, carnes magras y aceites.