YHÚ. Una comitiva fiscal-policial se adentró hoy en el predio de una estancia invadida por supuestos «sintierras» y constató una descontrolada deforestación. Además, hallaron varias maderas aserradas y postes listos para su venta.
Los invasores derribaron árboles en el camino para obstaculizar el paso de las patrulleras. La fiscala contra Delitos Ambientales de Caaguazú, Martha Leiva, encabeza la intervención acompañada de un centenar de policías de diversas unidades.
La propiedad de Alba Núñez se encuentra ubicada en la localidad de Bella Vista, distrito de Yhû, departamento de Caaguazú, límite con los de Canindeyú y San Pedro, sitio en donde fueron asesinados dos policías por presuntos narcos.
Según las reiteradas denuncias por parte de la propietaria del inmueble, los supuestos campesinos ingresaron en el predio hace varios meses, creando zozobra entre los arrendatarios y otros dueños de las tierras. Los hombres están armados y realizan la tala de árboles con total impunidad, por lo que se cree que habría directa complicidad de la Policía de la zona.
La fiscala reveló que hallaron varias maderas aserradas y que seguirá la recorrida para constatar más delitos ambientales en el sitio, a pesar de que los labriegos derribaron los árboles en el camino.
Alba Núñez pide a las autoridades que realicen el desalojo de los ocupantes ilegales, quienes ya improvisaron pequeñas casitas, que en realidad son para los que trabajan en la deforestación.
Existen serias sospechas de que la propia Policía estaría detrás del tráfico masivo de maderas y carbón en el lugar. Gran parte de las maderas y postes van a parar a granjas de altos jefes policiales, por lo que resulta muy difícil el combate a este flagelo. Los lugareños de Sidepar dijeron que a cualquier hora salen camiones repletos de madera.