El próximo 12 de junio llegarán unas 11.000 vacunas contra la influenza enviadas por la
Organización Panamericana de la Salud (OPS) por pedido del Ministerio de Salud.
Actualmente, solo quedan algunas pocas en el interior del país y el próximo lote que vendrá será distribuido exclusivamente entre los grupos de riesgo.
El coordinador técnico del Programa Ampliado de Inmunización (PAI) del Ministerio de Salud, Dr. Gustavo Chamorro, informó que el 12 de junio llegará un lote de 11.000 dosis de vacunas contra la influenza.
El galeno explicó que solo estarán disponibles en dos hospitales y el objetivo es que sean aplicadas a personas de grupos de riesgo que aún no pudieron inmunizarse. “Ya está reservadísimo para ellos: los trabajadores esenciales, niños, adultos mayores y embarazadas”, precisó
Las vacunas fueron solicitadas por el Ministerio de Salud debido a que el país quedó desabastecido tras la inusual alta demanda que generó en la población el miedo a adquirir el COVID-19.
Anualmente, se distribuyen 1.200.000 dosis en todo el país, que son aplicadas de manera lenta durante varios meses. Sin embargo, este año las vacunas se acabaron en cuestión de semanas.
Por ese motivo, explicó el coordinador del PAI, pidieron una reconsideración especial por parte de la OPS, que aceptó enviar un nuevo cargamento con las dosis que tienen disponibles, teniendo en cuenta que a nivel mundial es muy alta la demanda. “Ayer nos comunicaron la ruta de embarque y estarían llegando aproximadamente el 12 de junio”, destacó en contacto con ABC.
Chamorro destacó que actualmente hay algunas dosis distribuidas en hospitales del interior de país, pero tanto Asunción como Central están desabastecidos.
La aplicación había sido dividida en dos etapas. La primera se inició el 15 de abril y para finales del mes ya se habían aplicado 800.000 dosis, por lo cual empezaron a escasear en varios puntos de vacunación.
Recordemos que los prioritarios son los niños de 6 meses a tres años, las embarazadas y los enfermos crónicos con edad comprendida entre 3 años y 59 años. Los trabajadores esenciales (periodistas, policías, militares, docentes, penitenciarios y trabajadores de aeropuertos, entre otros) debían acudir en la fase 3, pero las dosis se acabaron antes de la fecha prevista.
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